Anaitasuna gana también un partido de fútbol sala que ‘duró’ cinco días

El equipo de 2ª B se desplazó el jueves a Pasajes para jugar los últimos minutos de un encuentro que tuvo que suspenderse el pasado sábado

Un líder tiene que exhibir su condición en todos los momentos y ante cualquier situación. Y eso es lo que ha hecho el equipo de Anaitasuna que milita en la Segunda División B, al llevarse los tres puntos en un partido que duró cinco días, ya que comenzó el pasado sábado y, tras tener que suspenderse por la condensación que había en la pista, se reanudó el jueves. El resultado final (2-4) certificó el buen hacer de los de Pamplona ante el Afantxo FK, colista de la clasificación.

El encuentro se inició el sábado con los rivales poniendo sobre la mesa desde el principio la táctica de portero-jugador. Arriesgaron con el convencimiento de que, con ese juego, podían poner en aprietos al cuadro navarro. Y así fue.

Entre las condiciones de la pista, que no eran las más adecuadas para el juego de los de Jose Narvaiz, y el miedo de los pamploneses a perder el encuentro, Anaitasuna se metió en su campo y jugó a aprovechar sus ocasiones, tanto en planteamientos de estrategia como en alguna acción individual.

Con esta dirección marcada, Íñigo, primero, y Andoni con un golazo con su pierna izquierda, después, pusieron por dos veces la superioridad en el marcador. Sin embargo, en esos dos momentos y con los pamploneses asumiendo la dificultad que iba a haber para adelantarse en el electrónico, los vascos pudieron igualar la contienda en sendas jugadas posteriores a los tantos de Anaitasuna, fruto también de la relajación de los navarros, que veían ponerse de cara el partido. Con ese 2-2 se llegó al descanso.

El paso por los vestuarios hizo que el Afantxo FK decidiera suprimir la táctica de portero-jugador. Por ello, los blanquiverdes dispusieron sobre la pista su mejor juego. No obstante, el rival, al percatarse de que corría el riesgo de encajar otro gol, regresó al juego de cinco.

Durante esos minutos, la cancha ya empezó a ponerse peligrosa, debido a la condensación. Tras varias caídas de jugadores, los árbitros, después de hablar también con los dos equipos, tomaron la decisión de suspender el partido. En el electrónico restaban 11 minutos por jugarse.

CORREGIR LOS ERRORES

Y esos minutos se jugaron este jueves. Anaitasuna se desplazó a Pasajes con la intención de corregir los errores del sábado y, por qué no, ser más valiente y eludir el miedo de caer derrotado ante un equipo de la parte baja de la tabla.

Dicho y hecho. Con el certeza de que el Afantxo iba a poner en práctica el juego de cinco y, a pesar de mostrar algunos nervios por los pocos minutos de juego que quedaban, los de Narvaiz tuvieron que hacer frente a un inicio dubitativo, en el que Raz realizó dos paradas de mucho mérito.

Tras ello, el entrenador de Anaitasuna activó también el juego de cinco, con el que rompió la dinámica rival. De este modo, en dos robos, uno de Andoni y otro de Mikel, los navarros incrementaron dos veces su marcador, que terminó con el 2-4 definitivo.

Para Narvaiz, se trató de «una victoria dificilísima, en la que nos costó sacar adelante el partido». «Hay que reconocer -apunta- que el parón nos vino bien para poder corregir cosas que habíamos hecho mal el sábado. Fuimos más valientes y, con una pizca también de suerte, nos llevamos los tres puntos«.

Sin tiempo apenas de descanso, los blanquiverdes afrontan este fin de semana un enfrentamiento contra el Zierbena, quinto en la clasificación y que visitará la pista de la Catedral, donde se prevé un partidazo.