Las bajas lastran al equipo de fútbol sala de 2ª B, que cae con contundencia ante el E.D. Brunete

Los madrileños atacaron durante todo el partido con portero-jugador, una táctica con la que sacaron un beneficio muy amplio

El equipo de fútbol sala de 2ª B de Anaitasuna fue derrotado este pasado fin de semana en la visita a la pista del madrileño E.D. Brunete, donde cosechó un duro resultado adverso de 7-1, la primera derrota de la temporada.

El conjunto navarro viajó hasta la Comunidad de Madrid con siete bajas, tanto por lesiones como falta de jugadores por motivos personales. Sin embargo, el equipo emprendió el rumbo con la confianza de poder regresar después a Pamplona con los tres puntos.

No obstante, desde el inicio del partido se vio que no era el día del cuadro pamplonés. Además, los rivales habían estudiado mucho la manera de jugar de los pupilos de José Narvaiz, por lo que, desde la primera jugada del encuentro y hasta el pitido final, todos sus ataques fueron con portero-jugador. Un juego poco vistoso, pero muy válido e inesperado para la plantilla y el cuerpo técnico del club navarro.

A los dos minutos de juego, los visitantes ya perdían por 2-0, viéndose desarbolados y sorprendidos por el juego de los madrileños. Después de ajustar un poco la defensa, Anaitasuna se pasó los siguientes 18 minutos defendiendo e intentando robar algún balón para recortar el marcador. Pero en ataque tampoco se tenían las ideas claras y el conjunto se encontraba fuera de sitio.

El paso por los vestuarios trajo el cambio de que Anaitasuna salió también con portero-jugador. Pero, a la postre, esto sería un error, ya que el equipo no movió bien el balón y, cuando lo hizo, lo hacía de manera errónea.

De este modo, fueron cayendo los goles en contra, sin demasiada oposición y con mucho desorden por parte de los navarros. El tanto que marcó el 1-4 en el electrónico dio esperanzas a los de la sociedad navarra, aunque se acabó convirtiendo en un espejismo, debido a que los goles rivales siguieron sumándose, hasta llegar al 7-1 final.

GANAS Y PUNDONOR

Pocas positivas se pueden sacar de una derrota así. A pesar de que los jugadores de Narvaiz no tuvieron su mejor día, las ganas y el pundonor que pusieron sobre la pista hasta el último segundo y el saber perder que hubo tras tres victorias consecutivas suponen datos positivos que rescatar de una jornada fatídica.

Ahora, le toca al cuerpo técnico liderado por Narvaiz trabajar y estudiar, más si cabe, todas las alternativas de juego que los navarros tendrán que realizar a lo largo de la temporada para seguir registrando resultados favorables.

Toca también recuperar a los jugadores lesionados y esforzarse en la semana, de cara a este mismo sábado, cuando se celebrará el segundo derbi de la campaña. Precisamente, ante el Tafa F.S., uno de los conjuntos más complicados que, aunque no pase por su mejor momento, como ya se vio en la Copa, son un equipo a tener muy en cuenta.