El equipo de fútbol sala de Anaitasuna tropieza en la primera piedra del ‘play-off’ y cae por la mínima en Ibarra

Los de Jose Narvaiz necesitarán ganar este sábado en la Catedral para avanzar a la siguiente ronda de la fase de ascenso a la Segunda División

No empezó de la mejor manera posible la fase de ascenso a Segunda División para el equipo de fútbol sala de Anaitasuna. En el último partido de la liga regular, había perdido contra el Lauburu Ibarra, que se metió en el play-off y que, precisamente, era su primer rival en la fase de ascenso. Y en el primer partido de la eliminatoria, los vascos volvieron a superar al conjunto pamplonés, que salió de la localidad guipuzcoana con una derrota por 1-0. A los de Jose Narvaiz les vale con cualquier victoria este mismo sábado en el Pabellón Anaitasuna para superar al Lauburu Ibarra y seguir vivo en el play-off.

El encuentro del pasado sábado se inició con una defensa alta por parte de los dos equipos, aunque los locales saltaron mejor a la pista, mientras que a los blanquiverdes les costó asentarse en un polideportivo lleno hasta la bandera de aficionados del Lauburu Ibarra.

En el inicio, dos grandes paradas de Iker imposibilitaron a los guipuzcoanos estrenar su marcador. Sin embargo, cuando Anaitasuna comenzaba a meterse en el duelo, una doble tarjeta amarilla a Íñigo le colocó defendiendo en inferioridad.

Pero los visitantes no se achantaron y demostraron sus grandes cualidades en la zaga, aguantando esos minutos sin encajar ningún gol. La exitosa defensa dio alas al cuadro de Narvaiz, por lo que el partido se igualó de tal manera que los porteros pasaron a ser los protagonistas de la tarde. Antes de que se llegara al descanso, las ocasiones más claras fueron para el club pamplonés, pero la primera parte terminó con un empate a cero que resultaba muy justo para ambos conjuntos.

La segunda mitad arrancó tomando el mismo rumbo. En los primeros minutos, los locales dominaron y tuvieron las ocasiones más favorables. Pero conforme pasaban los minutos, los blanquiverdes fueron dominando el juego. Las defensas se imponían a los ataques y en las transiciones era cuando llegaban las oportunidades de gol, que fueron escasas.

Cuando parecía que el partido iba a finalizar con la igualada en el electrónico, Anaitasuna sufrió otra expulsión. Una situación que el Lauburu Ibarra aprovechó para anotar el 1-0 a falta tan solo de 45 segundos. En ese breve tiempo, los visitantes disfrutaron, incluso, de alguna ocasión para regresar al empate, ya que durante los últimos 25 segundos jugaron con superioridad, debido a una expulsión de los locales. No obstante, el marcador ya no se movió.

A POR LA VICTORIA

Anaitasuna afronta, por tanto, el duelo de este sábado a las 15.30 horas en la Catedral con la necesidad de remontar. Con una victoria, a los navarros les vale para seguir haciendo historia en este segundo año en la Segunda División B.

En opinión de Narvaiz, fue «un partido muy físico, en el que las defensas y los porteros estuvieron mejor que los ataques». «Visto cómo fue el encuentro, no está mal el resultado. Aunque tuvimos ocasiones para marcar, se dieron las circunstancias para haber regresado a Pamplona con una mayor diferencia en contra. Está claro que debemos salir a por todas en nuestra pista», argumenta el técnico de Anaitasuna, que felicita a sus jugadores por el trabajo realizado. «Daba la sensación de que teníamos que ser favoritos por haber ganado la liga, pero jugamos contra un gran club que está haciendo muy bien las cosas para competir y resolver con acierto estos enfrentamientos», apunta.

Narvaiz añade también que él nunca había vivido un partido con tanta tensión. «Hubo momentos en los que creo que debí haber ayudado más al equipo desde el banquillo». «Quiero felicitar al Lauburu Ibarra, porque, a pesar de haberlo sufrido, dio gusto ver su polideportivo lleno, con una afición entregada a su equipo«, afirma.